Cómo la tecnología de la construcción ahorra tiempo y dinero

La tecnología avanza cada vez más rápido.
Encontrar tiempo para evaluar nuevas herramientas consume recursos valiosos. Implementarlas y capacitar a todo el equipo requiere aún más tiempo. Cuando los presupuestos de los proyectos ya son ajustados y los plazos apremian, los equipos no pueden dedicar el tiempo necesario a tecnologías que podrían beneficiarlos a corto plazo.
A pesar de los avances tecnológicos en los últimos años, los trabajadores en obras aún deben tomar decisiones importantes basadas en procesos manuales. Con un amplio margen para errores humanos, muchas decisiones se basan en visitas al tráiler de obra para obtener la información más reciente. Estos mismos equipos suelen depender de documentación física en papel, que debe reimprimirse y redistribuirse continuamente. Es evidente que estos procesos tradicionales no son ni eficientes ni eficaces. Las empresas deben comprender el alcance completo de los beneficios (y posibles desventajas) que implica adoptar nuevas tecnologías, como el aumento de la eficiencia, la sostenibilidad, entre otros.
Reemplazar el papel por correos electrónicos es un avance, pero no suficiente. El correo electrónico representa solo una parte del flujo de información que ocurre durante el ciclo de vida de un proyecto. La rapidez en la transferencia de datos y la precisión de la información transmitida pueden afectar de manera significativa los márgenes de ganancia del proyecto. La industria de la construcción ha mostrado tradicionalmente resistencia a la implementación de tecnologías modernas, lo que ha frenado su avance durante años. Afortunadamente, esto está empezando a cambiar.
Parte 1. El proceso de adopción
El cambio no ocurrió de la noche a la mañana. En 2014, algunas empresas comenzaron a utilizar servicios simples en la nube y dispositivos móviles en sus proyectos. Al mismo tiempo, surgieron nuevas soluciones a nivel empresarial como el Modelado de Información de Construcción (BIM), los sistemas CRM (Customer Relationship Management) y herramientas para recolección de datos en campo.
Además, en distintas partes del mundo comenzaron a establecerse normativas internacionales. En 2016, el Reino Unido exigió el uso de BIM Nivel 2 para todos los grandes proyectos gubernamentales, lo que aceleró la adopción tecnológica. La experiencia ganada por los contratistas en proyectos públicos fomentó la adopción de BIM en el sector privado. Se puede decir que esta exigencia marcó el comienzo del cambio, haciendo del BIM una parte habitual de la entrega de proyectos en poco tiempo.
Sin embargo, aún existen muchas empresas (incluso líderes del sector) que no aprovechan al máximo las tecnologías disponibles. Aunque algunas usan software moderno, no han actualizado sus procesos. Por ejemplo, pueden utilizar BIM pero seguir dependiendo de documentos de Word, cadenas de correo o hojas de cálculo, sin explotar plenamente las capacidades de gestión documental que ofrece la tecnología. Esta desconexión es uno de los mayores retos para la adopción tecnológica, especialmente cuando las plataformas colaborativas aún no son un estándar en la industria.
Muchas empresas aún confían principalmente en el correo electrónico como medio de comunicación, mientras que herramientas básicas como Dropbox se utilizan para compartir archivos. Sin embargo, la gestión de versiones y trazabilidad es mucho más complicada con estos métodos de lo que debería ser.
Parte 2. Confianza para la eficiencia
Otro factor importante en la lenta adopción tecnológica en la construcción ha sido la disposición a invertir en dispositivos inteligentes para empleados, en diferentes equipos y ubicaciones. Estos dispositivos representan una inversión considerable, y las empresas deben confiar plenamente en sus trabajadores al proporcionarles tablets o smartphones. La capacitación en el uso correcto del equipo y del software correspondiente requiere tiempo y recursos. Sin embargo, cada vez más empresas están viendo grandes beneficios al no solo confiar en sus empleados con tecnología avanzada, sino también al capacitarlos continuamente para aprovechar al máximo las herramientas.
No hace mucho, estos dispositivos estaban reservados para superintendentes o cargos superiores, pero eso ha cambiado. La proliferación de dispositivos inteligentes en la industria ha generado mayor interés en el desarrollo de aplicaciones y en nuevas herramientas que ayudan a los empleados con tareas como acceder a información actualizada en cualquier momento o rastrear problemas.
Las empresas rápidamente comprendieron que las ventajas superaban con creces los costos: mejor comunicación, flujos de trabajo más ágiles, reducción o eliminación de errores de diseño, entre otros.
La naturaleza altamente competitiva del mercado ha llevado a la mayoría de las empresas hacia el camino del BIM, impulsando su adopción y ayudándolas a mantenerse relevantes y eficientes. Aprovechando la tecnología moderna, las compañías pueden mantener cronogramas, sincronizar equipos y controlar los presupuestos del proyecto.
Parte 3. Gestión de riesgos
Las nuevas tecnologías permiten a los equipos entender mejor las tareas diarias y por hora de sus miembros. Esto favorece la rendición de cuentas, mejora la asignación del tiempo y conduce a una gestión de riesgos más efectiva. Diversas herramientas móviles pueden facilitar el proceso de revisión al unificar planos y modelos, eliminando el tiempo que antes se destinaba a emparejar planos físicos y ubicar elementos específicos.
Un ejemplo más es el aprendizaje automático. Los sistemas modernos de machine learning pueden analizar video de obras y detectar problemas de seguridad o eficiencia, incluso en la etapa de preconstrucción.
Para adoptar correctamente una nueva tecnología, es esencial identificar primero los desafíos específicos, y luego evaluar herramientas que los resuelvan directamente. También es recomendable investigar la calidad del soporte técnico y leer testimonios de otros usuarios. Una vez elegida la tecnología, debe integrarse completamente en la cultura de la empresa. Aunque la adopción de nuevas tecnologías puede presentar obstáculos, generalmente conlleva mejoras drásticas en los procesos manuales, lo que ahorra tiempo y dinero a los equipos.