Dogen City, la ciudad flotante japonesa que podría convertirse en un modelo para el mundo
Japón está desarrollando un proyecto de ciudad flotante, autosuficiente y resistente a los desastres naturales. La ciudad, llamada Dogen City, se ubicará en el Mar de China Oriental y tendrá capacidad para albergar a 10.000 personas.
La construcción, liderada por la start-up japonesa N-ARK, se realizará sobre una plataforma flotante de 1,58 kilómetros de diámetro y unos 4 kilómetros de circunferencia equipada con una serie de sistemas que la harán autosuficiente, incluyendo plantas de energía solar y eólica, sistemas de tratamiento de agua y residuos, y una red de transporte público.
Dogen City como aliada de la seguridad y la medicina
Dogen City servirá como refugio ante desastres naturales como tsunamis, terremotos o huracanes al estar anclada al fondo marino, lo que le permitirá resistir olas de hasta 10 metros de altura. La ciudad también tendrá un sistema de alerta temprana que advertirá a los residentes de cualquier amenaza inminente.
Además, se diferenciará de otras ciudades flotantes propuestas por su enfoque en la atención sanitaria y la integración de un centro de datos submarino que ofrecerá servicios de telemedicina, análisis de datos sanitarios y simulación para el descubrimiento de fármacos.
Un proyecto ambicioso
Dogen City es un proyecto ambicioso que podría tener un impacto significativo en el mundo. Sin embargo, el proyecto también presenta algunos desafíos, como su elevado coste. La empresa estima que el coste de la construcción ascienda a 100 billones de yenes (unos 800.000 millones de dólares).
El gobierno japonés ha aprobado el proyecto y está proporcionando fondos para su desarrollo con el deseo de que Dogen City se convierta en un ejemplo inspirador de cómo podemos abordar los desafíos del cambio climático y los desastres naturales. Por ahora, se prevé que las obras de la ciudad finalicen en 2030.