La importancia de la tecnología BIM en el patrimonio histórico

La necesidad de digitalizar la información en tiempo real y de forma multidisciplinaria convierte a la metodología BIM (Building Information Modeling) en una pieza clave dentro del sector AECO (Arquitectura, Ingeniería, Construcción y Operaciones), ya que esta tecnología también brinda a los profesionales de distintas áreas del sector la posibilidad de trabajar de manera colaborativa durante todas las etapas de un proyecto de construcción, siendo por ello también esencial para el sector del patrimonio histórico.
De esta forma, BIM colabora con esta área en los procesos de investigación, normativas oficiales, gestión segura e innovadora, así como en la gestión de procesos de estudio y conservación.
La combinación de la tecnología BIM con la estrategia de la ciencia del patrimonio ha proporcionado un valioso conocimiento industrial y desarrollo colaborativo basado en la investigación, al crear nuevas formas de gestionar datos digitales del entorno construido histórico y también modelos de información de construcción a partir de datos de monitoreo y simulación en edificaciones patrimoniales.
Así, con el objetivo de facilitar el concepto de colaboración y la gestión de recursos entre los diversos actores involucrados en proyectos vinculados al patrimonio histórico, el software BIM integra visualización multidimensional con bases de datos paramétricas completas, y va mucho más allá del 3D al incorporar datos inteligentes con múltiples representaciones y funciones.
El proceso de ilustrar digitalmente todos los elementos que componen una edificación es resultado de la tecnología BIM y generalmente se compone de:
- Documentos y datos vinculados: Insertar información utilizando tecnología BIM permite incluir información detallada con especificaciones técnicas de productos, manuales de operación y mantenimiento, informes, estudios de caso, videos, audios y cualquier archivo o información digital relevante para el objeto constructivo.
- Geometría (2D y 3D): Basada en datos métricos que documentan el tamaño, la posición y las dimensiones de superficies visibles, componentes y el entorno del patrimonio histórico.
- Información no geométrica: Incluye todo lo que se refiere a la apariencia, las características físicas de la construcción (materiales y estado) y también lo intangible, como las características históricas y culturales, el estilo arquitectónico y el tiempo de existencia. Esta cantidad de información BIM es la que convierte el modelo geométrico y genérico en un objeto específico y personalizado.
Los edificios de patrimonio histórico suelen ser proyectos con geometría compleja y elementos arquitectónicos que requieren más tiempo para representar con detalle las estructuras constructivas. Por ello, la metodología BIM es esencial, ya que permite precisión y elimina posibles discrepancias. El Nivel de Detalle (LOD) también se considera un punto importante, ya que es a través de él que se pueden cuantificar y describir todos los detalles geométricos incluidos en los componentes derivados del modelo BIM.
Los sitios de patrimonio histórico se benefician de la metodología BIM en diversos procesos, como la evaluación de opciones de diseño, estimación de costos, simulaciones constructivas, cálculo de cantidades, detección de información incoherente, gestión de proyectos, entre otros. Sin embargo, la implementación de BIM en proyectos complejos relacionados con patrimonio histórico debe realizarse en paralelo con una estructura de flujo de trabajo bien planificada, coordinada por estándares y protocolos.
Actualmente, existen pocos estándares BIM enfocados en el desarrollo de la construcción vinculada al patrimonio histórico, por lo tanto, la adopción de especificaciones y normas BIM para este tipo de proyectos aún no es sencilla. Pensando en mejorar esta situación, COTAC ha desarrollado un trabajo importante en relación con las normativas para las áreas de mantenimiento, conservación y restauración.