La interoperabilidad no se puede considerar sin estándares abiertos

Ha habido un verdadero progreso en la industria BIM hacia los estándares abiertos; esto se confirma con titulares como el acuerdo de colaboración anunciado en junio de 2016 entre Autodesk y Trimble. Desde entonces, ambas compañías han trabajado juntas para mejorar la interoperabilidad y ofrecer a los usuarios una mayor flexibilidad en sus flujos de trabajo. Autodesk ya había dado un paso similar en 2008, cuando lanzó un intercambio de API con Bentley Systems en un intento de optimizar la interoperabilidad en el diseño espacial y de infraestructuras.
Además, el verano pasado, el CEO de Bentley Systems, Greg Bentley, explicó en una entrevista con BIM+ qué significa BIM para un proveedor de software, haciendo hincapié en la cuestión de la interoperabilidad. Aunque Bentley es menos partidario de conceptos como IFC o COBie que sus competidores, la empresa ha desarrollado su propia solución para abordar la interoperabilidad.
«La interoperabilidad ahora se ofrece a través de servicios de colaboración que funcionan bien con el software de nuestros competidores», explica Greg en la entrevista.
Esto significa que se utilizan integraciones de compatibilidad punto a punto para lograr la interoperabilidad. Y esas integraciones no se basan en APIs abiertas. Bentley promueve el uso de su propio formato i-model, generado por plugins de software de diseño.
Así, los i-Models son la solución de la empresa al reto que representa la interoperabilidad. Se pueden crear mediante plugins gratuitos, tanto con herramientas propias (como MicroStation), como con otras, por ejemplo, Revit de Autodesk. Los datos de los i-Models son accesibles desde un controlador de base de datos ODBC, también proporcionado por Bentley.

¿Qué es la interoperabilidad?
Antes de profundizar en el tema, veamos la definición ofrecida por el grupo de trabajo AFUL:
«La interoperabilidad es la capacidad de un producto o sistema, cuyas interfaces son completamente entendidas, para funcionar con otros productos o sistemas existentes o futuros, sin restricciones de acceso o implementación.»
Esta definición es solo una parte de lo que puede abarcar la interoperabilidad, pero nos permite extraer una conclusión fundamental:
No se puede hablar de interoperabilidad sin estándares abiertos.

Software BIM e interoperabilidad
Wikipedia dedica un subcapítulo a la interoperabilidad del software, en el que ofrece una definición un poco más específica:
«En lo que respecta al software, la interoperabilidad se utiliza para describir la capacidad de diferentes programas para intercambiar datos mediante un conjunto común de formatos de intercambio, leer y escribir los mismos formatos de archivo y utilizar los mismos protocolos.»
Uno de los puntos clave de la interoperabilidad del software es que los usuarios tengan la libertad de cambiar de un producto a otro sin perder sus datos tras la migración. Esto es especialmente importante en casos donde los datos deben mantenerse en el sistema durante mucho tiempo, evitando así quedar atrapados con un proveedor (vendor lock-in).
En la industria de la construcción, donde equipos de distintas organizaciones, disciplinas y fases trabajan juntos, es deseable que las diferentes herramientas puedan compartir información entre sí y que, si se desea, los datos generados en una fase puedan usarse en la siguiente sin necesidad de volver a introducirlos.
Este es el fundamento del OpenBIM.
Un flujo de trabajo OpenBIM es imposible sin software interoperable.

La interoperabilidad permite que los mejores profesionales de cada disciplina trabajen en un proyecto utilizando las herramientas con las que se sientan más cómodos y productivos.

Interoperabilidad semántica y BIM
Para comunicarse entre sí, los sistemas deben utilizar formatos comunes de datos y protocolos de comunicación. Algunos ejemplos de formatos son: XML, JSON, SQL, ASCII y Unicode. Entre los protocolos se encuentran: HTTP, TCP, FTP e IMAP.
Cuando los sistemas pueden comunicarse entre sí usando estos estándares, hablamos de interoperabilidad sintáctica.
Pero para que las herramientas BIM trabajen juntas, necesitamos más que solo la capacidad de transferir información:
necesitamos también transmitir el significado.
La información que se emite debe ser la misma que se interpreta al recibirla. Para lograr esto, ambas partes deben referirse a un modelo de referencia común para el intercambio de información. Es decir, necesitamos interoperabilidad semántica.

Qué no es interoperabilidad
![Imagen de grados de interoperabilidad]
(Esta figura es tomada del grupo de trabajo sobre interoperabilidad de AFUL, citado anteriormente, bajo el título «Grados de Interoperabilidad».)
Sin embargo, podríamos decir que las dos primeras categorías no representan una verdadera interoperabilidad. Veamos lo que dice Wikipedia al respecto:
«Cuando un proveedor se ve obligado a adaptar su sistema a uno dominante que no está basado en estándares abiertos, no se trata de interoperabilidad, sino simplemente de compatibilidad.»
Los plugins para herramientas BIM son formas comunes de ofrecer este tipo de solución basada en compatibilidad.
«El proveedor detrás de ese producto puede optar por ignorar cualquier estándar futuro y no cooperar en ningún proceso de estandarización, utilizando su posición casi monopólica para imponer su producto como el estándar predeterminado debido a su posición dominante en el mercado.»
Fuente: http://blog.areo.io/bim-interoperability/