Can we make small BIMs?
Implementation
This case study has been translated from Spanish. View original
Published by:
Datasheet
Company: BIM a pequeña escala
Location: Valencia, Spain
Year of the project: 2015
Published: 15/01/2016
Description
Bajo la idea "no todo son hospitales y aeropuertos, los pequeños también queremos hacer BIM", Enrique Alario, en colaboración con otros profesionales del sector, ha puesto en marcha la iniciativa 'BIM a pequeña escala' con la voluntad de compartir experiencias BIM "que nos permitan aprender los unos de los otros." Los participantes de esta iniciativa, totalmente abierta para todos aquellos profesionales del sector que "quieran iniciarse en el BIM pero no saben por donde empezar", se han reunido en varias ocasiones para abordar temas sobre el inicio al BIM.
A continuación os dejamos una reflexión de Alario sobre lo que 'los pequeños' pueden hacer para dar el salto al BIM:
«Grandes ingenierías, grandes estudios de arquitectura, grandes construcciones y edificios… tengo muy claro que para éstos perfiles el uso de BIM es el camino, pero ¿Solo sirve para ellos? ¿Qué pasa con los que la mayor parte de nuestros encargos con particulares, pequeñas edificaciones, rehabilitación o reformas?
Yo estoy convencido que también es una ventaja para este tipo de profesionales (entre los que en estos momentos me incluyo) ya que a pesar de que seguramente no se pueda aprovechar todo el potencial de la metodología, sí que aporta grandes ventajas que permiten optimizar el trabajo, mejorar la calidad y por lo tanto ofrecer un mejor servicio.
Éste es uno de los temas que eché de menos en el congreso EUBIM, el uso de BIM a pequeña escala, sin tener que plantearnos grandes consultorías de implantación, sino simplemente adaptando nuestro trabajo del día a día a esta “nueva” forma de hacer las cosas.
Me considero un novato en esto del uso de BIM, pero ya estoy manos a la obra. De momento ya me he comprometido a no utilizar CAD, sino aplicaciones de modelado. Es un primer paso, quizá simbólico, pues el estar acostumbrado al uso de CAD y cambiar a otras aplicaciones implica cuanto menos un proceso de adaptación que como mínimo va a suponer que tardes más en hacer las cosas al principio.
Yo lo he hecho, he superado los tres primeros proyectos y la tentación de volver a CAD ha sido fuerte, tenía el mono de CAD, ha sido como dejar de fumar, pero se ha ido pasando en síndrome de abstinencia y te aseguro que ahora me resulta mucho más rápido “modelar” que “dibujar”.
Los siguientes pasos van a ser aplicar las capacidades de gestión y de recopilación de información tanto del modelo a nivel de proyecto como del proceso de ejecución de las obras. Además, me he hecho con una licencia de MEDIT para obtener las mediciones directamente del modelo, en tiempo real teniendo en cuenta los últimos cambios realizados, de manera que las mediciones siempre están actualizadas.
Evidentemente no creo que vaya a conseguir dar aplicación a funcionalidades que impliquen a más agentes, pues a este nivel de obra va a ser complicado encontrar contratas que tengan implantado el uso de BIM, pero me propongo encontrar el uso para los pequeños estudios técnicos y aprovechar el blog para ir contando las ventajas que voy encontrando. De momento serían éstas:
-Modelado rápido a nivel básico, con mucha facilidad de realizar cambios y propuestas.
-Una vez modelado es muy rápido obtener todas las vistas que necesitemos sin ningún esfuerzo. Ya no hace falta escatimar en secciones.
-Mostrar vistas 3D al cliente para que tome decisiones, además de que se vende mejor un proyecto en 3D.
-Se puede crear alternativas dentro del modelo para que el cliente las valore, no solo a nivel visual, sino que sin ningún tipo de esfuerzo se puede dar una valoración económica precisa de cada una de las opciones, ofreciendo más datos al cliente para escoger.
-Mediciones rápidas y adaptadas a la última versión del modelo… siempre.
-Gestión del modelo por fases, como por ejemplo estado actual, demoliciones y reformado sin tener que duplicar los planos.
-Obtención de cuadros de superficies sincronizados con el documento de la memoria (ver vídeo)
-Gestión de control de calidad (ver vídeo)
Dificultades para pasarse a BIM
Ahora viene la parte difícil. Para pasar a BIM hay que superar algunas dificultades que en mi opinión son salvables, pero que a mucha gente les suponen una barrera de entrada (o una excusa en algunas ocasiones) que le impedirá dar el salto. Quizá cuando lo vayan a dar sea demasiado tarde.
Todo cambio de paradigma supone un coste, no solo económico, sino también técnico, de adaptación, de dejar atrás nuestra manera de trabajar y volver a aprender, pero es ley de vida.
Ahora ya estamos más que acostumbrados a trabajar con ordenadores, pero no hace mucho que entraron en nuestra vida profesional y supusieron cambios muy importantes. Inversiones en equipos, adaptar oficinas, conexiones, adaptar puestos de trabajo, gastos en conexiones, gasto energético… ¿os imagináis que no os hubierais decidido a adaptaros a este cambio? Pues ahora lo mismo.
Los principales escollos que he detectado de momento son:
-Coste de software. Vale, de acuerdo, es una inversión importantísima.
-Necesidad de adaptación técnica.
-Implicación de todos los agentes. Para que esto realmente funcione no pueden ser los técnicos los únicos que se adapten, aunque por algo se empieza.
-Necesidad de formación.
-Información sobre el uso que se le puede dar. Nadie se adaptará si no conoce las ventajas.
-Un campo muy amplio, implicará especialización. Se acabó eso de “yo lo hago todo”
Queda claro que no va a ser un camino fácil, pero en mi opinión es un cambio necesario que los técnicos, en especial nosotros los Arquitectos Técnicos tenemos que abanderar como gestores del proceso de edificación.
A continuación os dejamos una reflexión de Alario sobre lo que 'los pequeños' pueden hacer para dar el salto al BIM:
«Grandes ingenierías, grandes estudios de arquitectura, grandes construcciones y edificios… tengo muy claro que para éstos perfiles el uso de BIM es el camino, pero ¿Solo sirve para ellos? ¿Qué pasa con los que la mayor parte de nuestros encargos con particulares, pequeñas edificaciones, rehabilitación o reformas?
Yo estoy convencido que también es una ventaja para este tipo de profesionales (entre los que en estos momentos me incluyo) ya que a pesar de que seguramente no se pueda aprovechar todo el potencial de la metodología, sí que aporta grandes ventajas que permiten optimizar el trabajo, mejorar la calidad y por lo tanto ofrecer un mejor servicio.
Éste es uno de los temas que eché de menos en el congreso EUBIM, el uso de BIM a pequeña escala, sin tener que plantearnos grandes consultorías de implantación, sino simplemente adaptando nuestro trabajo del día a día a esta “nueva” forma de hacer las cosas.
Me considero un novato en esto del uso de BIM, pero ya estoy manos a la obra. De momento ya me he comprometido a no utilizar CAD, sino aplicaciones de modelado. Es un primer paso, quizá simbólico, pues el estar acostumbrado al uso de CAD y cambiar a otras aplicaciones implica cuanto menos un proceso de adaptación que como mínimo va a suponer que tardes más en hacer las cosas al principio.
Yo lo he hecho, he superado los tres primeros proyectos y la tentación de volver a CAD ha sido fuerte, tenía el mono de CAD, ha sido como dejar de fumar, pero se ha ido pasando en síndrome de abstinencia y te aseguro que ahora me resulta mucho más rápido “modelar” que “dibujar”.
Los siguientes pasos van a ser aplicar las capacidades de gestión y de recopilación de información tanto del modelo a nivel de proyecto como del proceso de ejecución de las obras. Además, me he hecho con una licencia de MEDIT para obtener las mediciones directamente del modelo, en tiempo real teniendo en cuenta los últimos cambios realizados, de manera que las mediciones siempre están actualizadas.
Evidentemente no creo que vaya a conseguir dar aplicación a funcionalidades que impliquen a más agentes, pues a este nivel de obra va a ser complicado encontrar contratas que tengan implantado el uso de BIM, pero me propongo encontrar el uso para los pequeños estudios técnicos y aprovechar el blog para ir contando las ventajas que voy encontrando. De momento serían éstas:
-Modelado rápido a nivel básico, con mucha facilidad de realizar cambios y propuestas.
-Una vez modelado es muy rápido obtener todas las vistas que necesitemos sin ningún esfuerzo. Ya no hace falta escatimar en secciones.
-Mostrar vistas 3D al cliente para que tome decisiones, además de que se vende mejor un proyecto en 3D.
-Se puede crear alternativas dentro del modelo para que el cliente las valore, no solo a nivel visual, sino que sin ningún tipo de esfuerzo se puede dar una valoración económica precisa de cada una de las opciones, ofreciendo más datos al cliente para escoger.
-Mediciones rápidas y adaptadas a la última versión del modelo… siempre.
-Gestión del modelo por fases, como por ejemplo estado actual, demoliciones y reformado sin tener que duplicar los planos.
-Obtención de cuadros de superficies sincronizados con el documento de la memoria (ver vídeo)
-Gestión de control de calidad (ver vídeo)
Dificultades para pasarse a BIM
Ahora viene la parte difícil. Para pasar a BIM hay que superar algunas dificultades que en mi opinión son salvables, pero que a mucha gente les suponen una barrera de entrada (o una excusa en algunas ocasiones) que le impedirá dar el salto. Quizá cuando lo vayan a dar sea demasiado tarde.
Todo cambio de paradigma supone un coste, no solo económico, sino también técnico, de adaptación, de dejar atrás nuestra manera de trabajar y volver a aprender, pero es ley de vida.
Ahora ya estamos más que acostumbrados a trabajar con ordenadores, pero no hace mucho que entraron en nuestra vida profesional y supusieron cambios muy importantes. Inversiones en equipos, adaptar oficinas, conexiones, adaptar puestos de trabajo, gastos en conexiones, gasto energético… ¿os imagináis que no os hubierais decidido a adaptaros a este cambio? Pues ahora lo mismo.
Los principales escollos que he detectado de momento son:
-Coste de software. Vale, de acuerdo, es una inversión importantísima.
-Necesidad de adaptación técnica.
-Implicación de todos los agentes. Para que esto realmente funcione no pueden ser los técnicos los únicos que se adapten, aunque por algo se empieza.
-Necesidad de formación.
-Información sobre el uso que se le puede dar. Nadie se adaptará si no conoce las ventajas.
-Un campo muy amplio, implicará especialización. Se acabó eso de “yo lo hago todo”
Queda claro que no va a ser un camino fácil, pero en mi opinión es un cambio necesario que los técnicos, en especial nosotros los Arquitectos Técnicos tenemos que abanderar como gestores del proceso de edificación.
Implementation sector
- Organizations
Type of Implementation
Size of the company
- Little BIM
Actors leading the implementation
- Bottom-Up